En 1971 una prospección en busca de gas en Turkmenistan, en el corazón del desierto de Karakum, sufrió un accidente y el agujero excavado en la tierra se derrumbó por culpa de una caverna subterránea.
El gas natural comenzó a manar del agujero y tuvo que ser incendiado para evitar que el gas matara a todo ser viviente que estuviera a cierta distancia de él.
Desde hace 35 años las llamas de aquel incendio se han mantenido provocando un espectacular fenómeno visual para todos los turistas que se aproximan al Darvaza (Puertas Ardientes), sobre todo de noche, cuando el cráter puede ser visto a millas de distancia.
El gas natural comenzó a manar del agujero y tuvo que ser incendiado para evitar que el gas matara a todo ser viviente que estuviera a cierta distancia de él.
Desde hace 35 años las llamas de aquel incendio se han mantenido provocando un espectacular fenómeno visual para todos los turistas que se aproximan al Darvaza (Puertas Ardientes), sobre todo de noche, cuando el cráter puede ser visto a millas de distancia.
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1 comentario:
Y yo pregunto… si sopla viento y se apaga… el gas matará a todo turista ser viviente que esté a su alrededor?
Existe la posibilidad de montar un sistema de bandejas metálicas (REGIBAN) de extremo a extremo y fomentar un asado para batir algún tipo de record guinness?
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